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El caudillismo: factores económicos, sociales y políticos en la Argentina del Siglo XIX (segunda parte)

 

                                Angel Vicente "Chacho" Peñaloza (1798-1863) caudillo riojano.

En esta segunda entrega, repasaremos las principales hipótesis acerca del caudillismo que se han elaborado antes y después del aporte de Halperín Donghi. ¿Fue un fenómeno puramente político? ¿Fueron las estructuras económicas las que determinaron el surgimiento de estos líderes? ¿Cómo ejercían su poder? ¿En qué basaban su prestigio e influencia sobre las masas rurales?

 

Análisis pioneros sobre el caudillismo

La mirada de la llamada generación del 37’ plantea el problema del caudillismo atendiendo fuertemente a los factores geográficos e históricos que determinaron su surgimiento. En general hay una visión del caudillo como una figura que asciende al poder a causa del debilitamiento de las instituciones del poder central. En este aspecto hay puntos de contacto con la visión de Halperín Donghi, mientras que hay diferencias en cuanto al contexto de producción de los análisis sobre el tema. Alberdi, Sarmiento y Mitre tuvieron una actuación política importante y muy cercana a los hechos sobre los cuales escriben. Por lo tanto, sus visiones sobre el fenómeno del caudillismo fueron variando paralelamente a la evolución de sus propias trayectorias políticas.

                      Domingo Faustino Sarmiento (1811-1888) Político y militar argentino.

A comienzos del siglo XX, se dan una serie de estudios sobre el caudillismo basados en un fuerte determinismo del medio y los factores heredados en la dilucidación de los diferentes procesos. Ayarragaray y Jose María Ramos Mejía sostienen que el caudillismo puede explicarse a partir de las características biológicas y psicológicas de las masas rurales. La desolación del desierto ejerce sobre la masa del campo una perjudicial influencia que lleva al embrutecimiento y el apoyo de este tipo de líderes. La visión de Halperín Donghi parece bastante lejana del determinismo, en varios aspectos simplificador y racista, de estos autores.

La nueva escuela histórica construye sus trabajos utilizando fuentes vinculadas a la situación político-institucional. Levene y Ravignani son dos exponentes de esta escuela, y rescatan al federalismo representado por Rosas como un proceso decisivo en el proceso de construcción nacional. Halperín Donghi tiene una mirada más amplia sobre el fenómeno del caudillismo, no tan centrada en los rasgos políticos e institucionales.

 

El revisionismo histórico

El revisionismo histórico nace en los años 30’ y atraviesa varias etapas. Son representantes de la primera fase de esta escuela Ibarguren, Palacio y Julio Irazusta. En general, dentro de un discurso nacionalista y reaccionario, rescatan a la figura de Rosas como paradigma de la conciliación de clases a favor de un predominio de la elite. Nuevamente se da un análisis del fenómeno histórico del caudillismo “contaminado” por las urgencias políticas que tienen estos intelectuales que apoyan el golpe de Uriburu. En los 40’ el revisionismo sufre cambios vinculados a un énfasis mayor en el estudio de la estructura económica. José María Rosa y Puiggrós (en la segunda etapa de su producción intelectual) expresan esta fase del revisionismo. Rescatan a los caudillos como defensores de los intereses económicos de la nación frente al avance extranjero vinculado a la facción unitaria. En contraste con estas hipótesis, Halperín Donghi sostiene que no existe un determinismo económico que explique linealmente el surgimiento de los caudillos, y por otra parte las decisiones económicas que tomaron los caudillos estaban motivadas por diversos aspectos que excedían lo puramente económico. 

                                    José María Rosa (1906-1991) Abogado, juez e historiador argentino

 Del mismo modo los análisis de Milcíades Peña, Puiggross (en su etapa comunista) y José Ingenieros analizan el fenómeno caudillista desde una perspectiva que le da a la estructura económica un peso predominante frente a la explicación más compleja e intrincada de Halperín Donghi.

 

Caudillismo y clientelismo

Uno de los historiadores que trató el tema del caudillismo contemporáneamente a Halperín Donghi es John Lynch. Lynch traza una explicación de estos liderazgos en donde las relaciones cliente-patrón tienen un peso fundamental. De este modo, el caudillismo es la ampliación a la esfera político-militar de una relación de dependencia laboral anterior. Esta hipótesis le reserva un papel totalmente pasivo a una masa “ignorante” desde el punto de vista político. Halperín Donghi difiere con esta postura, ya que afirma que no todo movimiento rural, en principio, es controlado y manejado por los caudillos (por ejemplo el protagonizado por grupos rurales en la campaña bonaerense en 1828 y 1829)

                                      John Lynch (1927-2018) historiador inglés
 José Luis Romero examina como se consolida la relación entre el caudillo y las masas rurales. En sus estudios plantea como algunos rasgos de los caudillos (valor, habilidad en la guerra, formas de hablar y comportarse) causan una afinidad y apoyo de esta masa cuyo soporte es más sentimental que racional. Puede encontrarse algún punto de contacto con Halperín Donghi en cuanto a ver en los caudillos cierta herencia del movimiento revolucionario de 1810 y la posterior guerra de independencia, y también con relación al igualitarismo y la democracia radical que, al menos desde lo discursivo, manifiestan estos líderes políticos.

 

Algunas miradas novedosas sobre el caudillismo

Entre los aportes de la historiografía posteriores a Halperín Donghi, aparecen algunas diferencias sobre el predominio de la gran propiedad en algunas regiones y su relación con la consolidación del poder de los caudillos más importantes. Los estudios de Gelman, Garavaglia y Fradkin para la campaña bonaerense verifican una estructura agraria más compleja que la descripta por Halperín Donghi. Estos autores señalan que la mayoría de la población rural está constituida en la primera mitad del siglo XIX por pequeños y medianos arrendatarios o propietarios dedicados a la agricultura o a la ganadería. Sara Mata sostiene también la considerable fuerza de estos sectores medios en Salta, y su decisivo apoyo en la etapa de ascenso de Güemes. Tanto en el caso bonaerense como en el salteño, hay una diferencia clara con respecto al análisis de esas estructuras agrarias hecho por Halperín Donghi.

El trabajo de Chiaramonte sobre el caudillismo concuerda con la  hipótesis de Halperín Donghi relacionada a las grandes diferencias que muestran las diferentes regiones en donde se dieron regímenes de tipo caudillista. Asimismo, hay semejanzas en cuanto a la tendencia a proteger los intereses de las clases propietarias que se verifica en los caudillos luego de 1820; y en la gran inestabilidad interprovincial que cubre el período. Hay una diferencia en el enfoque de Chiaramonte relacionado con analizar los diversos intentos de construcción de estados autónomos provinciales.

                        Marcela Ternavasio, historiadora e investigadora.

Ternavasio, Salvatore y Fradkin profundizan una idea presente en los trabajos de Halperín Donghi sobre la continuidad institucional que se da durante el dominio de los caudillos. Ternavasio expone como Rosas respetó en términos formales la ley electoral de 1821 y logró movilizar a importantes sectores de la población de la provincia para estos actos electorales. Salvatore y Fradkin muestran como Rosas mantuvo una estructura legal en la campaña. Estos trabajos destacan que más allá del poder represivo y militar con que contaba el rosismo, hubo una gran preocupación por parte del régimen por crear un consenso basado en mecanismos institucionales.

 

LÉASE

 Mata, S., "Tierra en armas. Salta en la revolución", en S. Mata, (comp), Persistencias y cambios: Salta y el noroeste argentino. 1770-1840, Prohistoria, Rosario1999

 Chiaramonte, J.C., "Legalidad constitucional o caudillismo: el problema del orden social en el surgimiento de los estados autónomos del Litoral argentino en la primer mitad del siglo XIX", Desarrollo Económico, 102, 1986.

 Salvatore, R., "El Imperio de la Ley. Delito, Estado y Sociedad en la era rosista", Delito y Sociedad, revista de Ciencias Sociales, 3:4-5, 1993-94.

 Fradkin, R., "La experiencia de la justicia: estado, propietarios y arrendatarios en la campaña bonaerense”, en AAVV, La fuente judicial en la Construcción de la Memoria, Buenos Aires, 1999.

 

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